viernes, 3 de marzo de 2017

Vincent van Gogh


 Este icónico y torturado artista se esforzó en transmitir su estado emocional en cada una de sus obras. Solo vendió una obra en toda su vida y ahora es uno de los artistas más populares. Famoso por la gran vitalidad de sus obras que se caracterizan por su expresividad y emotividad, de colores brillantes y energico empaste, en las que se adivinan los traumas de su vida, documentados a través de las cartas dirigidas a su hermano Theo.

Van Gogh nació en Holanda en 1853,  hijo de un pastor protestante. Viajó a Londres en 1873 y visitó París, por primera vez en 1874. Durante la década siguiente tuvo varios trabajos, incluso el de predicador.

"(Cuando me encontraba en el púlpito, me sentía como quien desde una oscura cueva subterránea vuelve a salir a la plena luz, y es maravilloso pensar que, desde ahora, predicaré el Evangelio por todo el mundo)"

 Empezó a pintar aproximandamente en 1883 y dos años más tarde se matriculó en la Academia de Amberes donde quedó impresionado por las obras de Rubens y las estampas japonesas. A su regreso a París, en 1886, conoció a Degas, Gauguin y Seurat y con su influencia aligeró los colores.

En 1888 se estableció en Arles, donde fue visitado por Gauguin y pintó la serie de los famosos "girasoles". En 1890 se disparó en el pecho y murió dos días despues

Vamos a analizar alguna de sus obras


Noche estrellada(1889)
Para alguno su mejor obra. A diferencia de la mayoría de sus obras, esta fue pintada de memoria. Como si hicera énfasis en su mundo interior, pinta un remolino emocional, representando un cielo radicalmente distinto de los anteriores.  Aquí sigue una estricta estructura de la composición, distribuyendo a través del lienzo un orden para crear un equilibrio y tensión, en medio de un remolino de cipreses. Un aparente caos dentro de un riguroso arreglo formal.
La Noche estrellada es famosa por hacer avanzar el acto de pintar más allá de la representación del mundo físico.




Los comedores de patatas (1885)

Su primera obra maestra, pintada cuando vivía entre campesinos y obreros en  Nuenen en Holanda. Van Gogh se esforzó en representar la realidad de la gente y sus condiciones de vida. Logra el efecto con pinceladas sueltas, describiendo las caras y manos de los campesinos, amontonados alrededor de una pequeña linterna, comiendo su escasa comida de patatas. A pesar de la evocadora naturaleza de la escena, este cuadro no se consideró acertado hasta despues de la muerte del artista. Hay que tener en cuenta que cuando esta obra fue pintada los impresionistas ya dominaban la vanguardia artística por eso a Theo le era imposible vender los cuadros de esta época.  Sin embargo esta obra demuestra el compromiso de Van Gogh de representar escenas cargadas de emoción y espiritualidad, idea que estableció a lo largo de su carrera


Terraza del café por la noche (1888)

Esta es una de las escenas que pintó el artista durante su estancia en Arles. Utilizando un contraste de colores, Van Gogh logró una superficie luminosa desafiando un cielo oscuro. Las líneas de la  composición nos llevan al centro de la obra, como si fueramos paseando por la calle adoquinada. Este café aún existe y es una meca para los fanáticos de Van Gogh. En una carta Van Gogh escribe: "Aqui tienes una pintura nocturna sin negro, solo con un hermoso azul, violeta y verde, con un entorno iluminado por un amarillo azufre pálido y un verde limón. Me divierte enomemente pintar la noche justo en el lugar..." Lo pintó en la calle, directamente, como los impresionistas, pero a diferencia de estos, no pintó la escena tal y como la veía, sino que añadió un tono espiritual y psicológico. Las pinceladas vibran con el sentido de la emoción y el placer  que Van Gogh experimentó al pintar esta obra

Autorretrato con la oreja vendada (1889) 

Despues del tragico episodio de haberse cortado parte de la oreja en Arles, Van Gogh pintó este autorretrato, creyendo que pintar lo ayudaría a recuperarse. Este cuadro da testimonio de la renovada fuerza y control del artista ya que pinta una escena con un realismo inusitado, donde las facciones están claramente modeladas y presta especial atención a los contrastes de las texturas de la piel, tela y madera. El artista se representa delante de un caballete con un lienzo que está en gran parte en blanco y se ve un grabado japonés en la pared.  Se aprecian las pinceladas sueltas y expresivas típicas de Van Gogh. Los fuertes contornos del abrigo y sombrero imitan las líneas del grabado japonés que está detras del artista. Al mismo tiempo despliega la técnica del impasto, una capa continua de  pintura humeda para  desarrollar un superficie texturizada para reforzar la profundizar la fuerza emotiva del lienzo. 


Paul-Ferdinand Gachet (1890)

El Dr. Gachet fue el médico que atendió a Van Gogh cuando salió del hospital psquiátrico de Remy. En este médico, el artista encontró una conexión personal y en una carta, el artista escribe: "He encontrado un verdadero amigo, algo así como otro hermano, mucho nos parecemos física y mentalmente". En este cuadro, Van Gogh representa  a Gachet sentado en una mesa roja, con dos libros amarillos y un florero cerca de su codo. El médico mira más allá del espectador y sus ojos comunican una sensación de tristeza interior que refleja no solo su estado de ánimo sino tambien el de Van Gogh. Van Gogh escribió a Gauguin que deseaba crear un retrato verdaderamente moderno, que capturara "la expresión desoladora de nuestro tiempo"




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